Descripción
Este libro pretende demostrar que el centro, el eje y la clave de la espiritualidad cristiana es el seguimiento de Jesús. La espiritualidad cristiana no tiene ni puede tener más origen y más fundamento que la persona de Jesús y su existencia concreta. Pero la forma más radical de recuperar lo concreto de Jesús y hacer de ello origen y fundamento de toda vida cristiana aparece en los evangelios como invitación y exigencia de Jesús a su seguimiento.
Recuperar a Jesús no significa sólo tener noticias de lo que fue en concreto su vida, misión y destino, sino participar en ello y reproducirlo a lo largo de la historia. El seguimiento de Jesús se convierte así en la fórmula breve del cristianismo porque enuncia la recuperación de Jesús y el modo de recuperarlo.
Tiene la virtualidad de resumir la totalidad de la vida cristiana y de evocarla desde lo concreto. Tiene el carácter de norma y también de ánimo a su realización, de exigencia por lo costoso y de gozo por haber encontrado la «perla preciosa».
Valoraciones
No hay valoraciones aún.